Quisiera saber.

Quiero saber que corre por tu mente cuando oyes mencionar mi nombre. Desearía estar ahí para saber que respondieras si te pidieran describirme con un color. Mentiría si te dijera que no pienso en ti todos los días, pero solo por el hecho de que quisiera saber cómo estas en verdad, ¿te detienes a pensar en mi por igual?. Podría preguntarte qué sientes al sostener mi mano mientras caminamos, y mi pulgar juega círculos con tu piel. Que piensas cuando ves que te estoy mirando con esa cara tonta con la cual te miro. Te amo con mi vida, con mi tristeza, con mi alegría, porque no amarte sería toda una aberración, porque cuando lo hago todo me resulta posible, porque estoy contigo y el mundo deja de ser una montaña rusa, deja de ser un desastre y se vuelve un poco de «nosotros«, por decirle así, te amo, así recordando lugares y momentos que siempre serán solo nuestros, porque cuando amas de esa manera no hay nada imposible, sientes que tienes fuerza, y muchas ganas de seguir construyendo mundos para alguien como esa persona, alguien que te llena y no solo espacios vacíos, te da ilusión porque sientes que estás volviendo a vivir, por eso te amo, lo hago porque no hacerlo me parecería tonto, egoísta, y triste, lleno de soledad que quizás hubiera conocido pero estoy aquí, y me siento el mas afortunado porque ahora sé que lo hago. Sé que nos amamos en este instante y en el «ahora» que hemos construido.

Son tus besos el motivo por el cual escribo.​
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-Avendaño